Cuando has tenido una buena meditación, y cuando tienes la energía alta, ¿qué sientes? ¡Nada importa! ¿cierto? ¡Nada realmente importa! Esto es lo que necesitamos saber.

La felicidad es nuestra propia naturaleza Lo que nos quita esta felicidad es ‘Quiero esto’ o ‘Quiero eso’. «Quiero algo», esto es lo que aleja la felicidad. Cuando no dices o quieres nada, la libertad estará ahí inmediatamente. Solo ten esto en mente, eso es todo. Nada, ¡nunca nada importará !

En el mundo siempre hay alguna imperfección, algunas cosas agradables, algunas cosas desagradables; todo es parte de la creación Cuando nada te importa, entonces las cosas suceden de la manera que desees . El 90% de las cosas pasarían automáticamente, o lo que sea que esté sucediendo, eso es lo que querrías.

En todo este drama, en todo este universo de multitudes, de diversidad, este complejo juego de vida y sociedad es inevitable. Las cosas vienen y flotan, y todo lo que entra y sale tiene un propósito. Una espina y un suave pétalo de rosa, ambos tienen su propósito . Todo se reduce a nuestro primer punto, visto en el curso: los valores opuestos son complementarios.

No te preocupes por nada No es necesario estar asustado o preocupado por nada . Dirás: «No me preocupo por el mundo, pero me preocupa mi conexión con el camino correcto, con el conocimiento, con Dios y todo eso». Te digo, ¡nunca se irá! Eso no irá. No te preocupes por eso en absoluto. ¿Lo entiendes? Tu conexión con lo Divino nunca se irá .

Aunque Jesús dice en su último momento, ‘¿Dios me has abandonado?’ Inmediatamente se dio cuenta de que no, que no lo había abandonado. Pero ese dolor a veces trae la pregunta: ‘Oh Dios, ¿me has abandonado?’

Incluso si te molestan, ¡no importa! Está bien. ‘Bien, me molestaron, ¿y qué?’ Siga adelante. Creo que sucede gradualmente. A veces ni siquiera te das cuenta de que te has vuelto incondicionalmente feliz.

Sri Sri Ravi Shankar